BOLIVAR EN EL ACONTECER POLÍTICO DE RUSIA
Edgardo Malaspina
1
La gesta anticolonial bolivariana tuvo gran
resonancia en Rusia donde se seguía
minuciosamente las actividades de los patriotas y se comentaban, con mucha simpatía,
las acciones bélicas de favorables resultados a los mismos. Los círculos
progresistas de Moscú, en la primera mitad del siglo XIX, llegaron a profesar
gran respeto por el Libertador y esta solidaridad, en algunas mentes preclaras,
se hizo incondicional; traspasando el umbral del verbo para descollar en la
propia acción: Impregnados en un romanticismo fraternal cruzaron los mares
algunos voluntarios rusos para engrosar las filas del primer ejército
internacional libertador que conocen los anales de la historia. Bajo las órdenes
de Bolívar combatieron y se cubrieron de gloria, entre otros, los rusos Ivan
Minuta e Ivan Millar, y cuyos nombres están inscritos en el monumento de Los
Próceres en Caracas.
2
El 14 de diciembre de 1825, en San Petersburgo,
coronaban al zar Nicolás I. La coronación bajo las tinieblas del inclemente
invierno, terminó en una sublevación: los más progresistas militares rusos
intentaron derrocar al régimen autocrático para tratar de implantar un sistema
democrático. Ellos pasaron a la historia como los decembristas. La rebelión fue sofocada sangrientamente y sus
líderes ahorcados o encarcelados en Siberia.
Se sabe con certeza que los decembristas tuvieron en Bolívar una de sus fuentes de
inspiración; y además los sucesos de 1825 suscitaron en el Libertador un gran interés: se tambaleó uno de los
bastiones de la Santa Alianza ,
enemiga de la libertad en América. Los historiadores soviéticos afirmaban que
la afinidad de ideas entre Bolívar y el decembrista Pavel Pastel significa más
que una simple coincidencia.
3
Unos meses después del frustrado golpe de San
Petersburgo a las mazmorras siberianas llegaba una carta dirigida a los decembristas: “llegará el tiempo deseado
caerán vuestras pesadas cadenas…” El autor de la carta era Alexander Pushkin,
el más ilustre de los poetas rusos, y el prologómeno de la misma constituía su
inmortal poema A Siberia, dedicado a
los decembristas. Pushkin, antizarista y de ideas libérrimas para su tiempo,
era un gran admirador de Bolívar; esto se puede constatar al leer su exquisita
novela-poema Eugueni Oneguin: se refiere al personaje principal que solía usar elegantemente
“el sombrero a la Bolívar ”. En la Europa , de aquellos tiempos, se puso de moda
llevar el sombrero como lo usaba Bolívar.
4
En 1826 la progresista revista rusa Moskovski
Telegraf publicó un articulo sobre Bolívar: “Habría que escribir muchos tomos
para dar cuenta de los afanes y las campañas de Bolívar destinados a avivar y
mantener el valor de los americanos…” Así empezaba el artículo, seguidamente
enumeraba las proezas del Libertador y terminaba con una pregunta: ¿Se necesita
acaso otros portentos para merecer el nombre de héroe?
5
En 1829 esta misma revista se refirió a Bolívar y publicó su retrato. Este raro
ejemplar litográfico del Libertador tiene la curiosa peculiaridad de que no se
parece a los otros, considerados clásicos y a los cuales estamos acostumbrados:
sus rasgos se asemejan mas a los de “un sencillo Vania Ruso” (la fisionomía típica
rusa por excelencia) que a los de un mantuano caraqueño. Las razones de tal
imprecisión son obvias y huelgan.
6
Al celebrarse el 200 aniversario del natalicio
del Libertador en 1983, la
Academia de la
Historia de la
URSS editó varios trabajos sobre Bolívar, entre los que se
destacan los de Gusey y Lavrestki. Por primera vez se imprimió en la URSS
un sello con la efigie del Libertador.
7
En 1974 Leonid Brezhnev, a la sazón máximo
líder de la URSS, en un mitin celebrado en La Habana decía emocionadamente: “la lucha de los
pueblos latinoamericanos por la libertad ya cuenta con una historia de más de
un siglo. El siglo diecinueve dio inmortalidad a los nombres de los héroes de esa lucha como Simón Bolívar…”.
IMÁGENES
- Sello con motivo de doscientos años del
nacimiento de Bolívar, emitido en Rusia en 1983.
- Retrato de Bolívar publicado en Moscú en 1829.